Hola!! ¿Cómo están? Bienvenidos!! En el post de hoy les voy a hablar sobre una técnica de maquillaje que me ha encantado en las últimas semanas y lo mejor es que puede ser utilizada para varios propósitos. Les va a encantar en especial a las chicas de piel mixta a grasa ;)

Esta técnica se llama baking qué quiere decir hornear, y consiste en aplicar polvo traslúcido sobre el corrector de ojos ya difuminado y dejarlo “hornear” de 10 a 20 minutos para después retirar el exceso de polvo con una brocha. Esto nos va a dejar el área de los ojos sin esos molestos pliegues y líneas que algunos correctores acentúan de más y además hará que nos dure todo el día intacto. Fascinante no? Este es un paso que puede ser diario si tienes ojeras muy marcadas o buscas durabilidad. Yo en lo personal es un paso que ya no puede faltar en mi rutina diaria.

Pero eso no es todo, también podemos usar el baking para iluminar y resaltar las áreas como: la barbilla, la frente, los pómulos y el puente de la nariz. Lo primero que tienes que hacer es aplicar correctores en crema, difuminarlos y encima aplicar polvo traslúcido en las zonas mencionadas o si bien sólo quieres aplicarlo en las zonas que tienden a ser más grasosas y dejarlo “hornear” por el mismo periodo de tiempo. Este paso yo lo recomendaría exclusivamente para eventos especiales, para salir por la noche, para fotografía, para climas húmedos y si tienes piel muy muy muy grasa. Les juro que me encanta porque no tengo que retocar mi maquillaje en todo el día y se los digo yo que tengo piel mixta!!

TIP: Si no te gusta el efecto tan mate puedes rociar algún mist o fijador para que el polvo se funda con tu piel y quede un aspecto más natural;)